
Lupin, la serie de Netflix que le anota triunfo a Francia
El arte francés es un sabor que tal vez no habíamos probado. Lupin, la serie de Netflix que le anota triunfo a Francia.

La serie Lupin de Netflix le anotó un triunfo a Francia (@netflixfr)
Los éxitos ya no están solo en nuestro vecino del norte. Están quedando cada vez más lejos esos tiempos con la llegada de plataformas como Netflix que dan espacio a trabajos de todo el mundo, y dejan que el público sea quien nomine y entregue los premios al talento de todos los países posibles. En este caso la serie Lupin le anota triunfo a Francia.
En Francia esta serie de Netflix ha causado un revuelo, el talentoso actor protagonista ha pegado un salto gigante a la fama internacional, y en otros países no podemos dejar de hablar de las zapatillas de Lupin y todos los modelos que salen en la serie.
Tal ha sido el éxito de la serie de Netflix, arte de Francia, que ya viene en camino la segunda temporada y el actor Omar Sy tiene cada vez más visitas en su cuenta de Instagram. Paréntesis: lo puedes disfrutar en la película Amigos Intocables (en Estados Unidos hicieron después una versión llamada The Upside o Amigos por Siempre).

Lupin, serie corta pero poderosa
La serie de Netflix Lupin es de aventura, fantasía y comedia, tiene 10 episodios y aprobación de 100 por ciento en el sitio Rotten Tomatoes. Es una muestra de que al público le encantan las series pequeñas y devorarlas en cuestión de horas, y de que muy probablemente hemos perdido de muchas buenas obras europeas, en este caso de Francia, todos estos años.
El protagonista de la serie Lupin ya tiene 2.1 millones de seguidores y es uno de los ejemplos de que Latinoamérica, Europa y Corea le están quitando el monopolio a Estados Unidos serie a serie, gracias a la televisión a demanda y las plataformas con subtitulos y doblaje.

¿Recuerdan aquellos tiempos donde teníamos que googlear “películas francesas” si queríamos ver algo de cine de otros lugares o independiente? Apenas nos llegaba el eco de grandes películas como Amelie (si no la has visto por el amor de quien quieras agéndala), y ni para qué hablar de una serie extranjera, porque eran casi inexistentes en nuestras vidas, excepto por aquellas que decidía alguna televisora (cof, cof, Mr. Bean).